viernes, 4 de diciembre de 2015


KANEKI y las máscaras... interacción social de mundos no tan distópicos

Hace aproximadamente un año terminaba de ver una serie de anime japonés llamada Tokyo Ghoul, del mangaka Shui Ishida. En ella, la trama gira alrededor de un chico que a sus 19 años es inmerso en una serie de vicisitudes entre los ghouls (demonios que comen carne humana) y los humanos. Kaneki Ken, el protagonista, se involucra incidentalmente con una ghoul y ésta lo ataca, sin embargo, en un accidente en el lugar donde suceden los hechos, ella muere y a él le transplantan órganos de ella. El cuerpo de Kaneki responde al transplante y pronto empieza a notar importantes diferencias en su cuerpo. 

Con este hecho que introduce el anime -basado del original manga Tokyo Ghoul- Kaneki pasa a interactuar con los ghouls, los cuales son estigmatizados en la sociedad, principalmente en la ciudad de Tokyo. El carácter que tienen estos seres, a los ojos de la sociedad, los hace pensar en seres abominables, que comen seres humanos por el simple apetito y son excluidos, además de mantener abiertamente una lucha permanente con la CCG -que es la versión de la policía que intenta reducir a los ghouls- y de intentar pasar desapercibidos.

Kaneki, quien en su carácter es retraído y más bien solitario, se ve obligado a conocer las normas del nuevo mundo al que ha ingresado, siendo apoyado por un grupo de ghouls encabezado denominado "Anteiku", asociación que da apoyo y asilo a ghouls débiles o que se están reformando. El grupo logra convivir con la sociedad, desde luego, sin hacer obvia su condición de ghouls. 

De nuevo, Kaneki poco a poco se va dando cuenta que como tal, forma parte de una minoría, socialmente establecida y que rema contra corriente. Su desarrollo social se ve limitado por las políticas del CCG, que intenta socavar todos los gupos de ghouls reconocidos, pues entre ellos hay una unión temporal para enfrentar las represiones militares, además de un fanatismo e ideología de destrucción y dominación, vertidas a través de diferentes líderes. 

Ello, desde luego, nos invita a presentar una sectariedad de la sociedad ghoul, cuya expectativa es permanecer superviviendo, amén de las condiciones que encuentran para su óptimo desarrollo. 

La serie en sí retrata estos aspectos de sociedades cuyos prejuicios entre uno y otro son profundos, el desprecio que sienten por cada uno y el anhelo de una sociedad libre de aquel, ya sea ghoul o humano. 

Kaneki se convierte en una suerte de eslabón, que mantiene viva su parte humana, sus actividades sociales y sus intereses. Sin embargo, también interioriza el interés de los ghouls, y busca respuestas a lo largo de la serie, conforme reafirma su compromiso para los nuevos compañeros en su búsqueda y su lucha.

Puede afirmarse, pues, que el encuentro entre la otredad se verá caracterizado por un profundo desprecio. Si bien a bien, la serie abre algunos aspectos de la sociedad japonesa, en particular, la de Tokyo, nos muestra de forma tangencial el escape a las normas. Por ello, pareciera utópico el accionar de la CCG, pero ante una sociedad disciplinada y que acata las normas, es sencillo encontrar a la anomalía del sistema,al actor divergente.


Tú que te ocultas tras esa mascara forjada con mentiras, recuerda: una mentira nunca vive hasta llegar a vieja. (fuente: https://freakuotes.com/frases/1235/tokyo-ghoul)



lunes, 23 de noviembre de 2015

Liguilla del fútbol mexicano 2015

Y las menores ¿hijo?

Se viene la llamada "Fiesta Grande" en el fútbol mexicano, y cómo tal, todas las expectativas se centrarán en diferentes escenarios. Desde un León contra América, por el morbo de las capacidades económicas de sus dueños, hasta un Jaguares vs Tigres que se antoja interesante. No obstante, en los formatos del fútbol nacional se estableció que cada equipo debería contar con platillas de categoría Sub-20 (esto es, jugadores menores de 20 años) y Sub-17 (menores de 17 años). Con modificaciones a su favor, los equipos  logran incrustar en cada categoría a aquellos elementos que no tienen la suficiente actividad en la Primera División, que andan cortos de ritmo o bien para acatar suspensiones por reglamento de la Liga MX, o por el del mismo club. 
Es ahí donde los clubes aparentemente deben preparar a sus jóvenes, venidos de sus Fuerzas Básicas (no me gusta el término cantera salvo para el club que lo encarna, Pumas) y que se foguean en torneos con el mismo formato salvo el límite de edad. 
Los equipos que logran un nivel importante en Primera División no necesariamente reflejan el mismo en sus categorías inferiores, y no es de sorprender que equipos como Pachuca, Atlas, Chivas, el mismo Pumas, estén luchando por la corona de las noveles categorías. 
Sin embargo, la ilusión, la garra y la pasión con la que estos jóvenes juegan no se ve desbordada en la Primera División, y aunque su futuro sea prometedor, sus debuts se ven lejanos. NO es culpa de ellos el perder ese sueño -al menos no en la mayoría- sino de los manejos de sus directivos. 
Las oportunidades no llegan como podría esperarse, y es reflejo de que en la sociedad Mexicana la gente cree poco en la juventud, cuando no es menospreciada y hasta humillada. SI bien dentro de las aristas del fútbol podemos encontrar intereses arreglados y hasta incongruentes, los jóvenes del barrio, del llano, del potrero, de la playa, que destacan con sus dotes y magia, no verán cristalizado un sueño por tener en mente prioridades diferentes, a las cuales no pueden escapar. Dinámicas familiares donde los ingresos son bajos, cuestiones de inseguridad y delincuencia, rezago social, educativos, son factores que se muestran fehacientemente en la gruesa línea de debutar o no en la Primera División. 

Por ello, les invito a seguir las categorías inferiores del futbol mexicano, además del Ascenso MX y la Segunda División, sólo con verlos y saber qué equipos juegan, cuáles existen de aquellos que tuvieron una raigambre hace 50 o 60 años, es un aliciente para pujar por oportunidades para nuevos talentos en el fútbol; incluso puede verse sorprendido por que en su localidad haya algún equipo inscrito oficialmente en los registros de la FMF.

¡Excelente lunes!

"El fútbol empieza como una democracia y acaba como una dictadura, porque al principio todos opinan pero al final sólo uno decide. Lo hace EL JUGADOR ante el BALÓN, el ENTRENADOR frente a la alineación y el PRESIDENTE en el momento de las grandes decisiones, aunque en este último caso se supone que con un grado de mayor consenso" - Johan Cruyff

Los invito a seguirme en mi cuenta de twitter

@alexgabriel_8